Estudié arquitectura en la
ETSAM (Universidad Politécnica de Madrid), donde entregué el proyecto fin de carrera (que me había tutorizado
J. Manuel López-Peláez) en 2013.
Durante mis estudios pasé mi año de erasmus (2008-2009) en Múnich (Alemania), donde cursé proyectos en la
TUM (Technische Universität München), en la Unidad docente de Iluminación (de la profesora
H. Deubzer).
La experiencia me encantó, me parecía que trabajar en un ambiente internacional, en otro idioma, me aportaba nuevas
herramientas y sobretodo me abría la mente a otras formas de trabajar o entender la arquitectura.
Ya antes de entregar el fin de carrera nos juntamos unos cuantos compañeros y fundamos el colectivo de arquitectura
y diseño “MP12”, donde hicimos pequeñas reformas, imágenes y concursos: entre ellos
“La rehabilitación del complejo la panificadora” en Vigo, donde obtuvimos el 2º Premio, o la re-activación del espacio
industrial
“Space to culture” en Bolonia donde quedamos
finalistas.
Pero yo tenía puesto el ojo en volver a Múnich, así que en 2014 me trasladé a vivir aquí donde he trabajado en diversos
estudios: en Schürmann-Dettinger, J2m o Element-A Architekten (donde me desempeño actualmente). Realicé unos cuantos
concursos entre ellos el del
“complejo educativo y deportivo Freiham” en Múnich o la
“Clínica para el tratamiento de enfermedades derivadas del estrés” en Gaflei (Liechtenstein) obteniendo en ambos
el
primer premio, pero pronto me pasé a los proyectos de ejecución y la organización y gestión de obra.
Entiendo la
arquitectura como una unidad indivisible de
integración en el entorno, funcionalidad, precisión constructiva, eficiencia energética y economía de medios, aunados
bajo la manta de un concepto. Me interesa el proceso arquitectónico en el que la construcción, las instalaciones, la
estructura, el paisajismo o la sostenibilidad nacen simultáneamente y de la mano de la composición espacial, configurándola
en ocasiones.
Me apasiona la luz. Siento pasión por el detalle, ese que le da una vuelta de tuerca a todos estos condicionantes, los
soluciona y además construye un espacio mágico. El que hace de la arquitectura un arte.
Considero la
comunicación una
herramienta fundamental para poder llevar a cabo todo este proceso con éxito, para poder coordinar a los miembros
del equipo que participan y los agentes que intervienen. Comunicación sobretodo con el cliente y el usuario, pues creo
que nunca debe olvidarse qué ni para quién se está construyendo.